Tres Puntos Aparte

jueves, octubre 05, 2006

Los besos...

Estos dos últimos días me he topado algunas veces con este tema: Los Besos. Y del tema con algunas direcciones: formas, sabores, intensidades, ocasiones, etc., etc., etc.

Si pudieras elegir el sabor de un beso, cuál sería??
Ayer me dio por pensar en una boca con sabor a mandarina helada... debe ser rico besar una boca dulce, fresca, jugosa.. mientras te topas con una lengua juguetona que te recuerda el sabor único de la mandarina.
Otra boca que me gusta besar es aquella en la que recién han sido cepillados los dientes... mmm... Nada tan bueno como una boca limpia, mentolada, fresca, fría....
En aquella conversación salieron besos de chocolate, limón, y vainilla. Pero... nop. Me quedo con mis mandarinas frías y mi Colgate Max Fresh (jejeje).... Aunque ahora que lo pienso bien, también es rico besar una boca que tenga sabor a whisky puro, pero cuando se está sobrio.

Ahora, Cuál es la mejor forma de un beso??
Para mi es aquella en la que las bocas inician un pequeño baile buscándose, recorren trozos de piel de forma lenta, llegan a los labios para jugar entre ellos y se van apegando más y más hasta llegar a la lengua y todas sus inmediaciones. Lentas, pausadas, disfrutando el sabor de cada recoveco. Mezcladas con pequeños mordiscos a los labios.... esos son los besos que alborotan...

Y si hablamos de intensidades?
mmm... creo que hay una intensidad para cada lugar. Alguna vez pude besar a alguien que -creo yo- pensaba que tenía una boa constrictor por lengua. Ni bien sus labios rozaron los míos empezó un movimiento extraño por atrapar mi lengua, mi paladar... yo no sé. Lo cierto es que mi líbido se quedó ahí. Atrapada entre mis propios dientes. Pero así mismo, conocí una boca que sabía que hacer, cuándo hacer y cómo hacer....

Y bueno.... creo que no hay ocasión exacta para los besos. O sí?
Caen donde caen, llegan en el momento preciso para expresarte que la otra persona está contigo, que te desea, que le gustas, que necesita de tu aliento, que tiene miedo, que quiere descubrir contigo cosas, que se enorgullece de ti, que te quiere enseñar nuevas cosas, que te ama, que te quiere hacer daño, que no quiere más que un beso, que...no sé... tantas cosas.
Y son buenos aquellos que llegan cuando no los esperas, cuando pierden miedo ante el público, cuando los necesitas, cuando tapan tu boca en medio de una rabieta, cuando dibujan sobre tus labios - o sobre tu piel - jeroglíficos, cuando aparecen en noches locas de luna llena, cuando te premian por los logros obtenidos, dentro de un carro, en el mar, bajo la luna, con gente o solitarios.

El beso es una sed loca que no se paga con beber, se paga con otra boca que tenga la misma sed.

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