Desde el domingo 4 de diciembre he pasado en la clínica... ese noche y algunas más dormí allá. Mi madre estuvo en terapia intensiva hasta el día 12 de diciembre y mientras eso pasaba me tocaba acomodarme en los asientos de afuera además de soportar frío y mosquitos. Pero no todo era malo, conocí a mucha gente interesante de Vinces, Chone y Manta... cada uno con una historia diferente que acompañaba bien a cada noche. Risas, chistes y vivencias...
Mi deber como hija era estar al lado de mi madre y así lo he hecho. En sí, desde el día en que salió de terapia todo ha sido despertar muy temprano y salir a la clínica, desayunar allá lo mismo todos los días -he desayunado tostadas y un Deli desde el 5 de diciembre-, pasar a la habitación, conversar y chochear con mi mami, esperar el almuerzo, acompañar a mi mami y luego buscar que almorzar.... bueno, en realidad mi estimada cuñada me llevaba la comida mientras mi mami estuvo en terapia pero desde el sábado ella y mi hermano se mandaron a cambiar. Y eso me mató a mi... no por el hecho de que no sé como movilizarme para buscar comida, nada que ver... sino por algo bien tonto de mi parte: No me gusta comer sola. No puedo. No como. No me pasa la comida si estoy sentada solita en una mesa. No me gusta. Así que, como no podía subir comida a la habitación de mi mamá... escondía tan solo lo que me entraba en mi bolsito... si señores: Deli y tostada.... dos veces en el día.
Hasta le pedí a un amigo -el día martes- que me acompañara... no pudo hacerlo. No comí. Recién ayer me armé de valor y fui al restaurante cercano. Vi a una chica que también comía sola y me acerqué, me costó decir: Disculpa, me puedo sentar en esta mesa?? Y ella puso cara de ("que'res loca?) "ya... está bien". Comí lo más rápido que he comido en mi vida. Wacala.
Hoy cuando estaba desayunando... me quede mirando mi tostada y no me la pude comer. Mi boca se resistió y pensé: "Dios no más... quiero mi lechecita en mi tacita con mi pancito y mi mamita al lado. Deja que nos vayamos. Que ya no sangre mi mami más por esa herida, por favor quiero mi vida normal de siempre"...
Subí a la habitación y estaba el médico que nos dijo: "Bueno, hoy pediré que le tomen un eco y que le cambien los apósitos, en los cultivos que le hicimos no hay ninguna novedad... así que no se preocupe, usted mañana podrá almorzar en su casa... bueno si quiere puede irse almorzando desde acá... pero ya mañana se le da el alta"
es..es... escuché bien???? De alta? mañana? De alta mañana??? YEEEEEEEEEE!!!!!
Por fin... voy a mi casita... a desayunar con mi mami y a olvidarme de las tostadas por un buen buen buen tiempo.
Y como ella no podrá hacer nada porque los brazos los tiene convalecientes pues me tocará cocinar bajo la dirección técnica de mi má. Así que si alguien quiere pasar un mal rato, lo espero a la hora del almuerzo en mi casa.
Pu! Pu!